La aventura de los smartphones de Huawei es sin duda una de las historias más tristes de todos los tiempos. No hace mucho, la empresa que competía por el liderazgo del mercado perdió a la mayoría de sus usuarios frente a competidores en todos los países fuera de China. La razón principal de esto es el embargo impuesto por Estados Unidos. Desde 2019, a Huawei se le ha prohibido trabajar con todas las empresas estadounidenses, incluidos los servicios de Google.
Aunque la compañía todavía produce grandes teléfonos como el Mate 60 y logra atraer la atención de los usuarios. Sin embargo, todo esto pronto podría empeorar mucho. Un legislador estadounidense está pidiendo al Departamento de Comercio de Estados Unidos que ponga fin a todas las exportaciones de tecnología a Huawei y a la principal empresa de semiconductores de China, SMIC. Aquí están los detalles…
Huawei y SMIC corren el riesgo de perder el acceso a la tecnología estadounidense
Un legislador estadounidense pide al gobierno estadounidense que deje de exportar tecnología a Huawei y SMIC, tras el descubrimiento de nuevos chips en el Huawei Mate 60 que pueden violar las restricciones comerciales. El representante Michael Gallagher, presidente del comité de la Cámara de Representantes sobre China, dijo en un comunicado que los nuevos chips «probablemente no podrían producirse sin tecnología estadounidense» y que SMIC puede haber violado la Regla de Producto Extranjero Directo del Departamento de Comercio. Dice que esto es una amenaza a la seguridad nacional.
Es probable que la propuesta de Gallagher enfrente la oposición de algunas empresas, que dicen que perjudicaría a la economía estadounidense. Pero sostiene que es necesario proteger la seguridad nacional. Como mencionamos anteriormente, Huawei ha estado bajo sanciones de Estados Unidos desde 2019, cuando la administración Trump agregó a la compañía a una lista negra comercial por preocupaciones de seguridad nacional.
Las sanciones han dificultado que Huawei obtenga los componentes que necesita para fabricar sus productos. Pero Gallagher dice que estas sanciones no han sido suficientes. Quiere aislar completamente a ambas empresas de la tecnología estadounidense. No está claro si el gobierno estadounidense atenderá el llamado de Gallagher. Pero su propuesta es una señal de las crecientes tensiones entre Estados Unidos y China en torno a la tecnología.
